Fuentes en la industria petrolera de Irán consultadas por la agencia de noticias FARS señalaron que varias compañías de la ‘lista negra’ de la UE están preparando pleitos en los tribunales internacionales con el fin de resolver el asunto vía legal.
Entre la treintena de afectadas hay compañías tanto gubernamentales como privadas y también personas físicas, especificó el vocero citado por la agencia. Son empresas y personas que reciben la mayor parte de sus ingresos del extranjero.Según el analista político Wilfredo Amr Ruiz, sería un proceso contra la ‘doble moral’ de Occidente y un intento de salida legal para Irán de las sanciones prematuras que definitivamente le están afectando. En su opinión, a los empresarios persas los llevó a su actual situación una “interpretación hipócrita, especialmente del Estado de Israel, de denunciar el programa nuclear iraní, cuando Israel no es signatario del programa del Tratado de No Proliferación Nuclear y está sentado sobre un arsenal de bombas atómicas que sí amenaza a la seguridad en el Medio Oriente”.
La Unión Europea, así como sus aliados a otro lado del Océano Atlántico, condena la supuesta dimensión militar del programa nuclear de Irán. Según sospechan, el país persa está desarrollando armas nucleares, algo que Teherán rechaza de plano, insistiendo en el carácter puramente pacífico de su energía atómica.
El castigo, que es el embargo al petróleo iraní, afectó mayormente a negocios que no tenían nada que ver con el programa nuclear. Eso podría conceder un importante argumento a los demandantes del sector petrolero en su litigio contra las restricciones por parte de la UE, que consideran arbitrarias, inhumanas e irracionales.