Desde el año 2000, han sido asesinados 82 periodistas mientras que otros 15 permanecen desaparecidos por la violencia de los carteles, según datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México (CNDH). Para evitar que estas cifras sigan creciendo, las Fuerzas Especiales del Ejército de México ofrecen rápidos cursos a fotógrafos y reporteros con el objetivo de que aprendan un protocolo mínimo de seguridad en escenarios de violencia.
El Ejército mexicano desarrolla estos cursillos con la
intención de que los representantes de la prensa entiendan mejor la dinámica de
la ofensiva antidroga y las medidas de seguridad que deben tomar.
La gente sin preparación actúa por instinto para protegerse y, generalmente, dan pasos equivocados. Por eso los militares han advertido cuáles son los puntos más seguros para resguardarse en un tiroteo. "Nos enseñaron que si estás cerca de un auto lo mejor es ubicarse a lado de las llantas, o debajo del auto, nunca detrás de éste", contó la fotógrafa Karla Tejada a AFP, y definió al curso de "interesante".
Por otro lado, los periodistas deben hacerse siempre una serie de preguntas básicas acerca de si vale la pena una determinada cobertura o de si no arriesgarían demasiado sus vidas. Asimismo, recomiendan evitar tomar decisiones de forma emocional.
En los últimos seis años más de 60.000 personas han muerto en México en enfrentamientos entre narcotraficantes y policías, según la CNDH. Muchas de las víctimas fueron niños y personas ajenas al crimen organizado.