Se aclara el misterio de la muerte del primer cosmonauta de la historia
Un grupo de expertos rusos presentó una nueva versión de la muerte del cosmonauta soviético y primer ser humano en viajar al espacio, Yuri Gagarin. Según sus datos, falleció por el descuido del otro aviador.
Yuri Gagarin y su instructor, Vladímir Seregin, fallecieron el 27 de marzo de 1968 tras realizar un vuelo de entrenamiento en el avión MiG-15. Los pilotos no informaron de ningún mal funcionamiento, pero de repente la comunicación con ellos se interrumpió y el avión se estrelló cerca de un pueblo en la región de Vladímir, en el centro de Rusia. Para investigar las causas del accidente se creó posteriormente una comisión gubernamental. Sin embargo, las conclusiones hechas por los especialistas no fueron divulgadas.
El ex aviador militar Igor Kuznetsov, junto con sus colegas, trataron de reconstruir las circustancias de la avería y explicar la conducta de los pilotos utilizando modernos programas de ordenador durante los últimos nueve años. Concluyeron que al volar a una altura de 3 kilómetros, Gagarin y Seregin descubrieron que la llave de ventilación de la cabina estaba en mal estado e intentaron bajarse, pero realizaron esta maniobra muy bruscamente y perdieron el sentido. Luego el caza entró en picado y cayó en la tierra.
Kuznetsov presupone que otro piloto que antes dirigió el avión es responsable de esas dos muertes. Según los investigadores, el aviador descuidó la revisión de la cabina, que ha costado la vida del primer cosmonauta y su compañero.
Actualmente existen varias hipótesis para explicar el desastre aparte de la versión propuesta, pero ninguna de ellas es aceptada universalmente. Kuznetsov cree que precisamente su escenario del desastre debe ser el oficial y poner fin a las teorías de la conspiración, las cuales incluyen muchas conjeturas fantásticas e improbables del accidente -hasta la historia que cuenta que los marcianos trataron de raptar a Gagarin-. El grupo de expertos de Kuznetsov insiste en que sólo una despresurización de la cabina podría provocar un error fatal de la tripulación.