El Informe de Seguimiento de la Educación para Todos (EPT) en el Mundo 2010, preparado por la Unesco advierte que la crisis financiera mundial puede privar de la educación, a millones de niños en los países más del mundo. Los resultados serán presentados por la directora general de la organización, Irina Bókova, y el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el 19 de enero de 2010 en la ciudad de Nueva York, en la sede de las Naciones Unidas.
El director del informe, Kevin Watkins, afirma que “la onda de choque de la crisis financiera amenaza con provocar un estancamiento, o incluso un retroceso, de los progresos hacia la educación básica, conseguidos en algunos de los países más pobres del mundo”. Según Watkins, existe una amenaza de que se forme una ”generación perdida” de niños, que al no poder ir a la escuela no recibirán la formación que les permita salir de la miseria.
El Informe de Seguimiento de la EPT analiza los resultados obtenidos en el marco de la Educación para Todos, un movimiento global dirigido por la Unesco, creado con el fin de responder a las necesidades educativas de todos los niños, jóvenes y adultos. El movimiento fue lanzado en 1990 en la Conferencia Mundial sobre la Educación para Todos en Jomtien, Tailanda, en la que participaron 155 países. Pasados diez años, en Dakar, Senegal, la comunidad internacional, formada por los representantes de 160 gobiernos, tomó en cuenta los logros y fracasos de la década y constató su compromiso de alcanzar la educación universal hacia 2015.
Asimismo fueron fijados los seis objetivos de dicho Plan: fomentar la educación de la primera infancia, -especialmente de los niños más desfavorecidos-, proporcionar la enseñanza primaria gratuita y obligatioria a los niños y el acceso a programas adecuados de aprendizaje y la preparación a la vida diaria a los jóvenes y los adultos. Entre los objetivos figuran también el aumentar en un 50% el número de adultos alfabetizados, lograr la igualdad entre los sexos en el ámbito de la cultura y mejorar la calidad de la misma.
El análisis de la Unesco de 2010 evalúa los progresos hacia la consecución de estos fines, prestando una mayor atención a los “indigentes de la educación”, esto es, “las decenas de millones de niños del mundo que todavía se ven privados de escuela”. El estudio define quiénes son éstos y por qué no tienen acceso a la escolarización, examina el coste de la “educación para todos” y formula, además, recomendaciones para mejorar la situación.