"El drone volaba cerca de la isleta de Charag y nuestra comprensión es que [...] estaba recopilando información económica y de inteligencia sobre el islote de Charag y petroleros [en la zona]", dijo Amir Ali Hajizadeh.
Charag, a 25 kilómetros de la parte continental iraní, es la principal terminal de Irán de exportación de crudo.
"La República Islámica de Irán tiene unas líneas rojas que los estadounidenses deben entender y respetar. Si lo hacen de nuevo, pueden esperar una respuesta aún más fuerte", agregó.
Anteriormente Washington dijo que aviones de combate iraníes abrieron fuego contra el aparato no tripulado de Estados Unidos en aguas internacionales el 1 de noviembre. Irán, a su vez, dijo que había repelido una aeronave que violó su espacio aéreo.
El portavoz del Pentágono, George Little, dijo el jueves que cazas iraníes Su-25 dispararon contra el avión no tripulado Predator MQ1, pero no lo impactaron.
En una advertencia a Teherán, el portavoz del Pentágono, dijo que EE.UU. estaba dispuesto a proteger sus fuerzas. "Tenemos una amplia gama de opciones, desde diplomáticas hasta las militares, para proteger nuestros equipos y nuestras fuerzas militares en la región y lo haremos cuando sea necesario", dijo Little.
El incidente subrayó el riesgo de una escalada de las tensiones entre EE.UU. e Irán en una disputa por el programa nuclear de Teherán.
Washington, la UE y otros organismos han impuesto sanciones contra el comercio de petróleo de Irán para presionarlo para que detenga su programa nuclear que, según ellos, está destinado para construir una bomba atómica.
Irán niega las acusaciones y afirma que su programa nuclear es exclusivamente para fines pacíficos.