Barack Obama llamó a todos sus compatriotas a seguir el ejemplo de Martin Luther King, un pastor estadounidense de la iglesia bautista que dedicó su vida a la lucha por la justicia social. Lo declaró el 18 de enero, en el día en el que se homenajea a este destacado defensor de los derechos civiles.
"Martin Luther King dedicó su vida a la lucha por la justicia social y la concesión de iguales derechos para todas las personas. Sin embargo, tras los 40 años transcurridos desde su pérdida todavía nos queda mucho que hacer", señaló el presidente. Obama invitó a todos los americanos “a continuar el trabajo de King y convertir este servicio (al país) en parte de su vida".
El presidente junto con su familia visitó una de las organizaciones sociales de Washington, el centro SOME (So Others Might Eat), donde colaboró en la preparación de comida para los indigentes. Más tarde se encontró con unos 150 compatriotas afroamericanos y repartió comida y café con ellos.
Después, con el fin de celebrar el acto de conmemoración del nacimiento de Martin Luther King, el presidente de EE. UU. se reunió en la Casa Blanca con un pequeño grupo de afroamericanos jubilados y sus nietos para conversar con ellos sobre el legado del movimiento de derechos civiles.
Por la noche, el líder americano con su esposa asistió al concierto 'Let Freedom Ring' en el Centro Kennedy, donde renombrados artistas estadounidenses organizaron un concierto especial con motivo del Día de Martin Luther King.