Investigan chantajes a celebridades italianas a cambio de fotografías
Comienza la investigación del caso de extorsiones de celebridades de Italia que fueron fotografiados en situaciones comprometidas.
Una de las víctimas del chantaje de los paparazzis italianos fue el nieto de Gianni Agnelli, magnate de la empresa automovilística Fiat, Lapo Elkann, conocido por sus excentricidades.
El juez Frank Di Maio, que investiga los casos de extorsiones directas a través de fotografias a personajes destacados de la vida italiana, sospecha que Elkann pagó 300.000 euros, para evitar la publicación de sus imágenes, en las que aparecía con un transexual. En 2005, Lapo Elkann se vio inmerso en un gran escándalo cuando fue hallado con síntomas de sobredosis de drogas en el piso de un transexual.
Entre las víctimas de los fotógrafos está incluso el primer ministro, Silvio Berlusconi, que prohibió la publicación de unas imágenes suyas hechas en su mansión en Cerdeña durante las fiestas navideñas de 2008. Según Berlusconi, el fotógrafoAntonello Zappadu le solicitó 1,5 milliones de euros por 700 imágenes.
El caso también afectaría a otras personas destacadas cuyos nombres se guardan en secreto. Según los datos de la fiscalìa se trata de unos 20 casos de chantaje. En el banquillo de los acusados podrían sentarse cuatro personas: dos fotógrafos, un jefe de una agencia de fotografía y un especialista de la publicidad.
Se conoce ya que uno de los testigos principales de los fiscales será el aministrador de una agencia fotográfica de Milán, Fabrizio Corona, conocido como 'el rey de los paparazzi'. Corona, arrestado en 2007 y condenado en diciembre de 2009 a prisión, ya se encuentra en libertad.
El fotógrafo fue condenado por chantajear a futbolistas, artistas e incluso a la hija de Silvio Berlusconi. Los jueces consideraron que Corona, que en Italia se había convertido en un personaje famoso, pidió dinero a celebridades para retirar del mercado fotografías que podían ser comprometedoras para ellos.
El juicio contra 'el rey de los paparazzi' se convirtió en aquel entonces en una pasarela de famosos y deportistas que acudían a testificar en el proceso para aclarar si fueron o no extorsionados.