Tony Blair explicará su decisión de invadir Irak
El ex primer ministro británico, Tony Blair, rendirá testimonio el 29 de enero en relación a una pesquisa sobre la guerra de Irak.
Blair deberá explicar su decisión de respaldar la invasión a Irak encabezada por Estados Unidos en el 2003, a pesar de que Saddam Hussein no poseía armas de destrucción masiva y de la fuerte oposición de la opinión pública británica. La comparecencia del ex primer ministro ante la comisión investigadora es esperada con enorme expectación. Blair tendrá que contestar a las preguntas de John Chilcot quien encabeza el comité especial de investigación de este caso.
Las indagaciones sobre las causas de la participación de Gran Bretaña en la segunda edición de la Guerra del Golfo, fueron iniciadas en noviembre del año pasado. Uno de sus precursores principales fue el sucesor de Blair, Gordon Brown. Antes varios testigos informaron de que el ex premier comenzó a idear sus planes de cambio del régimen político en Irak desde la primavera del año 2002 y usaba la información sobre las armas de destrucción masiva para justificar la intervención, escribe el periódico inglés The Guardian.
En el día del interrogatorio miles de adversarios de la guerra iraquí y extremistas musulmanes planean salir a las calles de Londres para expresar su protesta contra la política de Blair en 2003. Los servicios de seguridad ingleses van a reforzar las medidas de vigilancia para prevenir posibles actos terroristas. Según el periódico británico Daily Mail, todas esas operaciones de seguridad podrían costar desde 150.000 hasta 250.000 libras esterlinas.
Algunas familias de los soldados fallecidos en la contienda intentan pedir a John Chilcot que organice para ellos la entrevista separada con Tony Blair para discutir la guerra. Por ahora más de 40 parientes esperan la entrevista con el político y ya prepararon una lista de preguntas. Aunque otros familiares opinan que las explicaciones de Blair serían solo “un gasto inutil de tiempo”. Por ejemplo, Samantha Roberts, viuda de un militar fallecido en Irak, dijo que Blair no podrá hacer nada para devolver la vida a su marido. “Estará perfectamente preparado para el discurso y dudo que tenga algunos problemas”, dijo.