Una oficina pública de empleo ofrece puestos de bailarines de estriptís

El mundo lucha por todos los medios contra el desempleo causado por la crisis económica. Una oficina francesa pública de empleo propuso a una joven de París el puesto de bailarina de estriptís. La muchacha buscaba trabajo casi dos años, pero el nombre formal del puesto le llamó la atención: "animadora de chat para adultos". La verdad es que se trataba de un puesto de "mensajería rosa" que hace estriptís por internet.

La joven no podía creer que la oficina buscara también ofertas de tales profesiones.

"Animaciones de chats para adultos (mensajería rosa), trabajo de día o de noche. Se aceptan candidatos sin experiencia, la remuneración varía entre 1.400 a 2.000 euros con primas y contrato indefinido", rezaba el anuncio en el diario Le Parisien. Sin embargo, tras la sorpresa e indignación inicial la chica envió su currículo para saber más detalles. Ella afirma que "buscaba trabajo y animar un chat, aunque sea rosa, no exige una gran implicación". Muy pronto la llamaron.

Para su nuevo puesto sólo necesitaba un teléfono o una cámara. Además, los videos no se guardan y ni su familia ni sus amigos podrían reconocerla. Su entrevistador afirmó que tenía que hace estriptís, sólo si el cliente aceptaba, y le pagarían sólo por "intercambios picantes".

La joven especialista en telemarketing no acudió a la siguiente entrevista y se quejó de que una empresa estatal pudiera ofrecer tal tipo de actividades. En el servicio nacional de desempleo respondieron que según la ley no pueden rechazar un anuncio de ese tipo. Ofertas ilegales y discriminatorias son aceptables para Francia.