El sastre de los presidentes

En la política de más alto nivel los diseñadores de moda son los responsables de cómo vemos a los mandatarios día tras día. El sastre Georges de Paris ha cosido trajes para ocho presidentes estadounidenses durante los últimos 40 años.

De Paris, pese a su apellido, nació en Marsella, la segunda ciudad francesa, pero llegó a Washington siguiendo su amor y se domicilió allí para siempre. Después de la ruptura con su novia se quedó con sólo tres agujas y no tenía dónde dormir  por algún tiempo, pero logró juntar un poco de dinero y comprar su primera máquina de coser. Su reputación se volvía más sólida y a finales de los años sesenta, el presidente estadounidense de aquel entonces, Lyndon Jonson le encargó su primer traje. Luego el modisto gozó de buena fama como el único cuyos trajes los han llevado varios de los dirigentes del país.

“Mi favorito era Ronald Reagan. Era un buen hombre”, dice Georges de Paris. Entre sus clientes el diseñador francés parece preferir a los políticos republicanos, guardando también buenos recuerdos del ex gobernante George Bush.

Ahora Paris se concentra en el vestuario del actual líder estadounidense Barack Obama. El sastre está contento con el estilo del nuevo mandatario, diciendo que “es un clásico moderno”. Sin embargo, los vestidos de la primera dama no han impresionado mucho al diseñador que está buscando para ella otros estilismos. “Necesita modelos más cerrados. No le quedaban bien aquellos vestidos de antes”, explica.