Irán está contento con el proceso de construcción de la planta de energía nuclear de la ciudad de Bushehr —realizada por técnicos rusos— según declaró el embajador de ese país en Rusia, Mahmoud Reza Sajjadi, ante la agencia Interfax.
"Actualmente sentimos que Rusia participa en serio en este proyecto y tiene buenas intenciones. Notamos que hay un buen progreso", señaló el embajador. Sin embargo, según el diplomático, anteriormente "no existían esos colores tan claros" debido a que los ingenieros tuvieron demoras con la construcción, provocando el "descontento de la población iraní".
"Planeábamos ponerla en funcionamiento el año pasado pero resultó en que no lo hicimos. Esto causó cortes de electricidad", indica Sajjadi, agregando que al mismo tiempo la parte iraní "mira al futuro con optimismo".
La construcción de la central nuclear de Bushehr fue iniciada en 1974 por la empresa alemana Kraftwerk, una división de Siemens, pero quedó suspendida en 1980 después de que el Gobierno germano se uniera al bloqueo de suministros de equipamiento a Irán impuesto por EE. UU. tras la revolución islámica. Rusia en 1992 firmó un tratado con Irán para la cooperación en el campo del uso pacífico de energía nuclear. Desde 1999 en el país islámico trabaja la empresa estatal rusa Atomstroyexport que continuó la construcción de la planta.
El proyecto se realiza bajo el control del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).
En noviembre pasado la agencia Reuters adelantó que, según dos fuentes anónimas, el proyecto se finalizará en marzo de 2010 para coincidir con el Nouruz, el Año Nuevo iraní.