Fiesta en la Universidad de California creó una tormenta racial
La Universidad de California en San Diego (UCSD) sigue sufriendo las secuelas de una fiesta llamada "Compton Cookout" fuera de campus organizada por estudiantes. Para ella prepararon un volante basado en estereotipos raciales de los negros provocando revuelo en Facebook donde éste también fue publicado.
Según el diario Los Angeles Times, las invitaciones incluían referencias a "dat Purple Drank", aparentemente una mezcla de "azúcar, agua, Purple Drank, pollo, coolade (bebida sólo para la gente "guapa"), y por supuesto, sandía". Los organizadores de la fiesta decidieron hacer el evento al estilo "ghetto" el 15 de febrero en Compton, una comunidad cerca de Los Ángeles famosa por sus raperos y películas sobre los negros urbanos.
El evento organizado por varias fraternidades de UCSD fue condenado por la administración de la universidad por burlarse del Mes de la Historia Negra.
Las invitaciones describían a los llamados "ghetto chicks" como gente que "por lo general tienen los dientes de oro, inician peleas y disturbios y visten ropa muy barata...", personas con "un vocabulario muy limitado", que hablan en voz alta y comen sandías, pollo y beben licor de malta. A los invitados les ofrecían 40 barriles de Natural Light (también conocido como "Natty") y Purple Drank, una referencia a una bebida embriagante hecha con jarabe para la tos y popularizada durante el apogeo del hip-hop.
Los estudiantes negros se indignaron al enterarse de la fiesta, al igual que los administradores, quienes se preocuparon de que este episodio pudiera crear una mala reputación para la universidad. En la actualidad al menos 2% de los estudiantes de la UCSD es de raza negra.
Según el periódico, las chicas que asistieron a la fiesta tenían que vestir y comportarse de manera apropiada, como los negros, tal como imaginaban los organizadores. La comunidad negra estaba tan indignada por la explotación cínica de sus estereotipos que inició varias protestas masivas y profirió fuertes críticas a la Universidad y los organizadores del evento.
"No es entretenido", dice la joven estudiante negra Theresa Richards. "Es un evento desalentador y perjudicial. Estoy consternada de que tengamos que estar hablando de esto hoy, en estos tiempos", agregó.
Las tensiones sobre el incidente aumentaron el 18 de febrero, fecha cuando un estudiante del canal de televisión universitario utilizó epítetos raciales para defender la fiesta.
Esto produjo una ola de discusiones sobre la raza y el racismo en la universidad e inspiró a la institución de educación a adoptar una postura más proactiva en la promoción de la diversidad racial.
Además, la representación de NBC en San Diego informó que las autoridades de Universidad desean realizar clases de tolerancia y planean una serie de eventos de instrucción fuera del campus, incluyendo la campaña "No en Nuestra Comunidad". Además, los miembros de las fraternidades que participaron en el evento fueron expulsados de sus organizaciones, afirma el Times.
"No quiero ver que estas organizaciones simplemente pidan disculpas por sus acciones, quiero ver nombres", dijo sobre el incidente la miembro de la Asamblea de California, Isadore Hall III, cuyo distrito incluye a Compton. "Quiero que estos individuos y estas organizaciones entiendan que este comportamiento racista y sexista no será permitido aquí en California", agregó.