La tregua entre Israel y Hamás “va a ser frágil”

"La tregua siempre va a ser frágil, porque no se está atendiendo la raíz del conflicto palestino-israelí", insiste el analista político Wilfredo Amr Ruiz.


“La raíz del problema es el embargo y el bloqueo aéreo, marítimo y terrestre que sufren 1,7 millones de ciudadanos de Gaza, que es uno de los sitios si no el sitio más poblado del planeta”, acentúa el politólogo.

La densidad de población en la Franja de Gaza, un territorio de 365 kilómetros cuadrados, es de unos 4.600 habitantes por kilómetro cuadrado. Israel y Gaza están divididas por un muro con puntos de control fronterizo. Tel Aviv somete a Gaza a un bloqueo que impide la entrada y salida de personas y mercancías desde 2007, con el fin de derribar al régimen islamista de Hamás que se quedó con el poder político en la zona después de las elecciones de 2006. Israel, EE.UU., UE, Australia, Canadá y Japón califican el movimiento de organización terrorista.

“Igualmente se tiene que atender otro problema que es la ocupación militar en el margen occidental de Gaza que existe aún. Siguen pasando los años y los palestinos no tienen una expectativa real de progreso. Las negociaciones están estancadas”, puntualiza Ruiz.

Destaca también otros dos puntos claves del problema de la violencia: la “colonización” de los territorios palestinos por Israel o, en otras palabras, “la continua expansión de los asentamientos israelíes en el margen occidental de Gaza”, y la indiferencia general de la comunidad internacional respecto al conflicto palestino-israelí.

Tras ocho días de intenso fuego cruzado entre Israel y la Franja de Gaza, el pasado miércoles entró en vigor la tregua entre el Gobierno de Benjamin Netanyahu y Hamás. Hasta el momento, las condiciones de la tregua se han cumplido por ambas partes del conflicto a excepción de casos aislados. La semana de violencia le costó la vida a más de 160 palestinos y seis israelíes.