El riesgo de cáncer atenaza Fukushima

Aunque tras el accidente de la central de Fukushima en 2011, el aumento de la probabilidad de desarrollar cáncer todavía se considera baja entre los residentes, un reciente estudio muestra una mayor incidencia de cáncer en la región afectada.

Expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que el alcance real de los daños causados ​​a la salud de los residentes de Fukushima quedará claro solo en los próximos 15 años.

Sin embargo, tras encuestar a los residentes locales de diferentes edades sí notaron un 10% más alto en el riesgo de contraer cáncer en comparación con los datos registrados antes del accidente.

La mayor incidencia se registra en la localidad de Namie, ubicada a 22 kilómetros al norte de la central nuclear ‘Fukushima-1’, donde los hombres tienen un riesgo más alto de enfermar de cáncer de tiroides que las mujeres. Los expertos advirtieron que el principal grupo de riesgo en la prefectura es el de las personas que ahora tienen alrededor de 20 años.

El 11 marzo de 2011 un terremoto y un posterior tsunami hicieron que tres de los seis reactores de la central nuclear de Fukushima explotaran. Como consecuencia del accidente, cerca de 150.000 personas fueron evacuadas.

La compañía japonesa Tepco, propietaria de la planta nuclear, admitió por primera vez el mes pasado que el desastre pudo haberse evitado, ya que el nivel de seguridad no estaba a la altura para hacer frente a un tsunami de tal envergadura.