El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades del país pudo detener la pandemia en 1974. Durante los próximos 36 años en el país solo se registraron 1.400 casos de malaria pero, según los datos, todos ellos fueron llegados de otros países donde no podían hacer frente a la enfermedad con eficacia. Sin embargo, en 2010 en Grecia se registró un brote de este mal.
Este año la situación empeoró aun más, advierten los médicos helenos. En el período de entre el 1 de enero y el 22 de octubre hubo 75 nuevos casos, 16 de los cuales fueron de origen local. Los médicos insisten en que el país necesita medidas urgentes para frenar esta infección. Para ello es necesario fortalecer el control de la enfermedad y mejorar la situación financiera del sistema de salud, que últimamente sufre más y más recortes, sostienen los trabajadores de la salud.
Se terminan los medicamentos
Entre tanto, la mayoría de los centros médicos del país denuncian la falta de medicamentos. Así, el hospital Tzaneio, que se ubica en la ciudad sudeste de El Pireo, alarmó que se terminaron los medicamentos antirretrovirales que se usan en el tratamiento de la infección del VIH.
Varias compañías farmacéuticas europeas anunciaron el suministro limitado de medicamentos a Grecia, que compra el Ministerio de Salud. Las farmacéuticas explicaron su decisión por el retraso del pago de las facturas por parte del Ministerio. Las autoridades griegas, a su vez, dicen que el escaso presupuesto no les permite pagar los medicamentos.
La oficina griega de la ONG médica y humanitaria internacional Médicos sin Fronteras denuncia que la situación se agrava por el sistema de salud griego, donde muchos ciudadanos no tienen acceso a los servicios de salud.