Las negociaciones al respecto duran ya meses pero se han intensificado recientemente. Según 'Kommersant', a finales del año en curso especialistas rusos visitarán una planta de reciclaje de municiones turca para después elaborar el formato óptimo de la cooperación y el acuerdo entre Rusia y la OTAN.
Pese a que en el procesamiento completo de todas las municiones caducas se pueden obtener metales ferrosos y no ferrosos, sustancias explosivas para su posterior utilización en minería, así como pólvora y combustible sólido, hasta hace poco en Rusia se daba prioridad a la destrucción de municiones mediante su voladura. Moscú también espera que el uso de la tecnología de Alianza ayude a reducir el número de accidentes durante la voladura de municiones.
Cambio de estrategia
Después de que en el 2012 fueran registrados varios accidentes en polígonos de destrucción de armas en Rusia, el Ministerio de Defensa se comprometió a detener completamente la destrucción de municiones mediante su voladura para pasar a su reciclaje exclusivamente industrial.La OTAN ya tiene un acuerdo de reciclaje de municiones, armas ligeras y sistemas de misiles antiaéreos portátiles con Ucrania. Más de la mitad del gasto de estos trabajos corre por cuenta de la Alianza.
Rusia y la OTAN trataron de llegar a un acuerdo sobre la utilización conjunta de municiones en 2005. Entonces, el coste del programa fue valorado en 73.000 millones de rublos (unos 2.344 millones de dólares al cambio de hoy), el 40% de los cuales estaba dispuesto a desembolsar la OTAN. Esta vez, según 'Kommersant', Rusia tiene previsto financiar todos los gastos de proceso.
A finales de 2011, Moscú adoptó un programa federal para el aprovechamiento industrial de municiones para el periodo 2011-2015 y para el periodo hasta el año 2020 con una financiación total de unos 1.250 millones de dólares.