El senador demócrata Robert Menéndez y su colega republicano Mark Kirk ya han redactado un borrador de sanciones que afectarían a los bancos extranjeros que tengan negocios con Irán en el sector energético y el del transporte marítimo y construcción de embarcaciones, entre otros.
EE.UU. amenaza con expulsar del sistema financiero norteamericano a los que se nieguen a romper los vínculos comerciales con Irán.
Anteriormente los norteamericanos ya habían aprobado otro paquete de sanciones contra la nación persa que redujo seriamente las ganancias petroleras de la República Islámica.
Asimismo, desde hace tiempo el Estado norteamericano prohíbe a sus ciudadanos y compañías hacer negocios con Irán.
Washington usa las sanciones como un instrumento de presión para obligar al Gobierno iraní a abandonar su programa nuclear, que según Occidente, tiene como finalidad la creación de una bomba atómica, y no fines pacíficos, como asegura Teherán.