El documento titulado ‘El peligro de la dispersión de las armas nucleares en Oriente Medio’ subraya que el estado hebreo se ha convertido en el único país en la región que no forma parte del NPT y lo exhorta a que abra todas sus instalaciones nucleares para que sean inspeccionadas por el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).
Los miembros de la Asamblea de la ONU instaron a Israel a que “se una al tratado sin demora”, y a descartar la elaboración, pruebas y almacenamiento de armas de destrucción en masa. Según precisa el documento, esto sería “una medida importante para la consolidación de la confianza entre todos los estados de la región y un paso hacia el reforzamiento de la paz y seguridad”.
Los miembros de la Asamblea General hicieron hincapié en la importancia de la creación de una zona libre de las armas nucleares en Oriente Medio para asegurar la no proliferación a nivel global”.
La celebración de la conferencia internacional dedicada a esta cuestión fue prevista para finales de año en Helsinki, Finlandia, pero finalmente se tomó la decisión de aplazarla por un tiempo indefinido. Una serie de países, incluso el Movimiento de Países No Alineados, atribuyeron la responsabilidad por el fracaso de los esfuerzos en este campo a Israel, debido a que el estado judío no se mostró dispuesto a participar en el foro. Israel no confirma ni descarta que posea armas nucleares.
En otra resolución, aprobada el mismo día, la Asamblea General propone a todos los países de Oriente Medio “que manifiesten su apoyo para la creación de la zona sin armas nucleares” en la región y “analizar la cuestión de los medios que podrían contribuir a lograr” el desarme total y completo.