El presidente Mohamed Morsi se vio obligado a abandonar el palacio y se dirigió hacia la residencia del jefe de Estado.
La oposición protesta contra las últimas decisiones del presidente. Miles de ciudadanos acudieron a la plaza Tahrir para protestar contra la nueva Constitución que atribuye un poder casi sin límites a Morsi.
La semana pasada el presidente egipcio anunció que el 15 de diciembre va a tener lugar un referendo obre el proyecto de la Constitución. El proyecto ha recibido mucha crítica por parte de la oposición, que lo califica de "islamista": está basado en las normas de la sharia y no dice nada sobre la igualdad de derechos de los hombres y las mujeres. También les llama la atención la parte que prohíbe la actividad política en los próximos 10 años a los ex ejecutivos del partido nacional democrático que existía durante la época de Hosni Mubarak. La propuesta Constitución limita también el poder judicial.