El presidente ecuatoriano respondió que conoce el dolor argentino por este ataque y manifestó su respeto, pero hizo referencia a la diferencia con que los medios tratan a otras víctimas, como por ejemplo, las de los bombardeos de la OTAN en Libia, que son silenciadas por la prensa que defiende los intereses de EE.UU.
La comparación despertó de inmediato en Argentina un enérgico rechazo por parte de la comunidad judía y los representantes de las víctimas de la AMIA. Tanto esta institución como también la DAIA (Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas) -las dos más importantes del país- exigen a Correa una rectificación urgente, lo acusan de banalizar el sufrimiento de los familiares y reclaman al gobierno de Cristina Fernández que exija al presidente Correa disculpas públicas.
"Una reacción desmedida"
Para Luis Bruschtein, que perdió a su esposa en el atentado de la AMIA las declaraciones del presidente Correa han sido inoportunas pero, según su criterio, también considera desmedidas las reacciones que ha suscitado en la comunidad judía argentina.“Me parece una reacción desmedida. Pero, ¿por qué? Porque creo que se sobreponen dos situaciones. Una es un contexto internacional, donde es entendible la preocupación mundial por una posible hipótesis de guerra, de invasión de EE.UU. en Irán, que no es una hipótesis traída de los pelos. Por eso hizo esta relación el presidente Correa”, dijo el periodista Bruschtein a RT.
La polémica surge en medio del avance de las negociaciones entre Argentina e Irán para juzgar precisamente a los imputados iraníes por el atentado a la AMIA.