Aunque ahora es legal fumar hierba en el estado de Washington, sigue estando prohibido en otros territorios estadounidenses. En Colorado la ley entrará en vigor el 5 de enero. Para los que abogan por la marihuana en el Noroeste Pacífico el levantamiento de la prohibición es una gran victoria. Pero puede que el Departamento de Justicia haga caso omiso de tal legalización.
Desde el momento en que los habitantes de Washington y Colorado votaron por legalizar el uso de la marihuana, el Departamento de Justicia aún no ha anunciado cómo va a tratar el tema de los derechos de los estados.
En el artículo publicado esta semana en el periódico The New York Times por Charlie Savage, oficiales de la Casa Blanca y del Departamento de Estado ya están discutiendo cómo y en qué casos la ley federal puede intervenir en la legislación de los estados.
Cuando se hicieron públicos los resultados de la votación en Washington y Colorado, el Departamento de Justicia hizo una breve declaración en la que clarificó que conforme a la Ley de Sustancias Controladas la marihuana es una sustancia ilegal.
Mientras tanto, los legisladores de tendencia liberal opinan que existe un instrumento para defender las leyes de estado de la legislación. La representante en el Congreso por Colorado, la demócrata Diana DeGette, introdujo una legislación que enmienda la Ley de Sustancias Controladas a fin de que la ley federal no intervenga en la legislación de estados sobre marihuana.
Según los sondeos de la agencia Public Policy Polling, seis de cada diez estadounidenses quieren la legalización de la marihuana.