Desde el año 2013 se podrá comprar hasta 5 gramos de marihuana al mes en las farmacias checas. En el primer año solo se podrá adquirir marihuana importada, pero más tarde se otorgarán licencias para cultivar cannabis a los productores locales.
Según Pavel Bem, uno de los autores de la nueva ley, el objetivo es “hacer marihuana accesible para los pacientes que la necesitan y la consuman a pesar de la prohibición”. Las medicinas con cannabis se usan en el tratamiento de pacientes que sufren fuertes dolores.
Hasta ahora las leyes del país permitían cultivar cannabis y consumir menos de 15 gramos, pero vender y comprar estaba prohibido.