"El secretariado de las Naciones Unidas está observando de manera preliminar las opciones sobre la presencia de una misión pacificadora de la ONU en Siria, pero la puesta en práctica de este tipo de operación sólo lo puede aprobar el Consejo de Seguridad, y bajo ciertas condiciones", dijo este lunes el viceministro de Exteriores de Rusia, Gennadi Gatilov.
"Por razones obvias, mientras en Siria están teniendo lugar acciones militares a gran escala esta idea no puede ser realizada. En otras palabras, allí no existe una paz que pudieran garantizar las fuerzas de paz de la ONU, ni un régimen de alto el fuego que estas fuerzas pudieran defender", agregó el viceministro.
Gatilov insistió además que Moscú considera inaceptable el intento de forzar a través del Consejo de Seguridad una resolución sobre el uso de la fuerza para superar la crisis siria, incluso si se hace a través de los ‘cascos azules’.
"Nuestra posición se basa en la necesidad de respetar los principios del derecho internacional y de tener en cuenta la experiencia histórica, lo que demuestra que la lógica unilateral, como ocurrió en Irak, así como la violación deliberada y la libre interpretación de las resoluciones del Consejo, como sucedió en Libia, no conducen a la solución de la crisis, sino que llevan a un empeoramiento grave y a largo plazo de la situación", concluyó el diplomático.
Anteriormente se informó que la ONU está estudiando la posibilidad de enviar una misión de pacificación de entre 4.000 y 10.000 soldados a Siria si el Consejo de Seguridad de la organización aprueba la intervención en el conflicto.