También el Parlamento ruso prohibió la actividad política en Rusia de organizaciones sin ánimo de lucro financiadas por EE.UU.
Además, los diputados aprobaron una enmienda según la cual la prohibición de entrar en territorio ruso se extiende no solo a los ciudadanos estadounidenses que violan los derechos de los rusos, sino a ciudadanos de cualquier otro país.
La ley es la respuesta a la polémica ley estadounidense Acta Magnitski que impone sanciones contra decenas de funcionarios rusos, supuestamente vinculados con la muerte en prisión del abogado Serguéi Magnitski .
El 14 de diciembre la Duma Estatal aprobó en primera lectura la ley 'Dima Yakovlev', que restringe la entrada en el país de los estadounidenses que violen los derechos los ciudadanos rusos. El pasado lunes el Comité de la Legislación Constitucional de la Duma Estatal aprobó las enmiendas al proyecto, una de las cuales establece la prohibición de las adopciones de huerfanos rusos por estadounidenses y la actividad de las organizaciones políticas sin fines de lucro financiadas desde EE.UU.
La ley fue llamada así por Dima Yakovlev, un niño ruso de dos años que murió en EE.UU. después de que su padre adoptivo lo dejara encerrado en un coche. La justicia estadounidense absolvó a los padres del niño.
La enmienda que establece la prohibición de adopciones de huerfanos rusos por estadounidenses y del funcionamiento de las organizaciones rusas que sirven de mediadoras en este ámbito, ha suscitado una fuerte polémica que ha dividido a la sociedad rusa. Los diputados del partido gobernante Rusia Unida y el Partido Comunista apoyan la ley. El presidente ruso Vladímir Putin dijo que "comprende la dura y emocionante reacción" de los diputados, pero dijo que "la posición del poder Ejecutivo es más contenida".
Este martes el primer ministro ruso, Dmitriy Medvedev, propuso al partido Rusia Unida elaborar un proyecto para resolver el problema de los huérfanos en Rusia, incluido el problema de la adopción en el país. Medvedev recalcó que “la adopción extranjera es una consecuencia de la falta de atención por parte del estado y de la sociedad".
Por su parte la Cancillería rusa, el Ministerio de la Educación y una serie de organizaciones públicas critican la ley y expresan su preocupacion ante la posibilidad de que afecte a los niños menos protegidos, como los inválidos, que a menudo son adoptados por los estaunidenses.
El Consejo presidencial para los Derechos Humanos se pronunció en contra de la ley y llamó a los diputados a "no perder altura moral ni adecuación de respuesta" [a la Acta Magnitski].
En la red la petición contra el proyecto de la ley reunió decenas de miles de firmas. El día de la segunda lectura alrededor de 70 activistas celebraron piquetes solitarios cerca de la Duma Estatal, mostrándose en contra de la ley. Varias personas fueron detenidas.
Está previsto que la tercera lectura de ley se celebre el 21 de diciembre.