En enero de 2011, después de tres semanas de violentas protestas en el país que dieron inicio a la primavera árabe en todo Oriente Próximo, Ben Ali huyó de Túnez. Actualmente reside en Arabia Saudita, donde obtuvo asilo político. Las cuentas millonarias que tenía en bancos suizos fueron bloqueadas, aunque él y su esposa se las ingeniaron para salir del país con 1,5 toneladas de oro. A pesar de todo lo que se llevaron, tuvieron que dejar muchas cosas.
Se calcula que los bienes expuestos a la venta este sábado podrían suponer unos 13 millones de dólares estadounidenses para el presupuesto estatal. Aparte del parque de 39 coches de lujo -incluido el Mercedes del sobrino del mandatario, Imed Trabelsi, fabricado a partir de fibras de carbono y cuyo coste llega a los 2,6 millones de dólares-, hay joyas, prendas de vestir, zapatos y elementos decorativos que adornaban el palacio presidencial y las casas de sus familiares.