"A pesar de los focos de tensión y de contraposición causados por las crecientes desigualdades entre ricos y pobres, por el predominio de una mentalidad egoísta e individualista expresada por un capitalismo financiero disoluto, y de las diversas formas de terrorismo y de criminalidad, estoy convencido de que las múltiples obras de paz de las que el mundo es rico testimonian la innata vocación de la humanidad hacia la paz", dijo el Sumo Pontífice.
A continuación, el Papa apareció en la ventana de su despacho para desear un feliz Año Nuevo
a las miles de personas que se congregaban en la plaza, donde manifestantes en favor de la paz portaban pancartas con los colores del arco iris y soltaron globos azules.
Las autoridades italianas detuvieron a un hombre que trepó a los andamios colocados junto a la plaza San Pedro y desplegó un cartel en el que instaba a Benedicto XVI a "frenar el terrorismo". El hombre fue identificado como Julián Jungarean, de origen rumano. Las autoridades italianas informaron que el incidente no afectó a las actividades del Pontífice.