El vicepresidente acusa también a la oposición de buscar un golpe de Estado especulando sobre la imposibilidad de que el dirigente preste el juramento.
Por su parte, el analista Arturo Villoria opina que "se hace mucho hincapié sobre este tema porque Chávez representa un movimiento y a un pueblo y está apoyado por muchos millones de venezolanos, pero no hay duda que él es un líder muy carismático", además sugiere que la oposición piensa que no podrían reemplazarlo fácilmente, ya que un reemplazo suyo no tendría tanto apoyo popular como el que mantiene el comandante.
"Yo creo que esa es la clave, que si Chávez no puede continuar en su puesto, pues ellos podrían llegar al poder más sencillamente", agregó Villoria.
"La oposición intenta aprovechar la incertidumbre sobre la salud de Chávez para poder cuestionar la legitimidad o la legalidad del Gobierno y de alguna manera intentan conseguir mediante presión y mediante los medios de comunicación lo que no han conseguido en las urnas", concluyó en sus declaraciones a RT.