China anunció el desarrollo de un avión de combate no tripulado. Pekín afirma que el drone será desarrollado con tecnología puramente china pero expertos en aeronáutica sospechan que se usarán elementos copiados del drone estadounidense X-47B.
“Iniciaremos las pruebas de los sistemas de ataque del robot próximamente”, declararon fuentes oficiales chinas. Pero al mismo tiempo Pekín está invirtiendo mucho en el desarrollo de drones de reconocimiento capaces de controlar la situación en la frontera de Pekín a Guam, zona de creciente actividad militar estadounidense.
Actividad japonesa
Por su parte Japón intenta seguir el ritmo de su rival. El Gobierno japonés ha anunciado sus planes de adquirir dos o tres drones de reconocimiento estadounidenses Global Hawk. Con estos aparatos de gran autonomía de vuelo (más de 30 horas) las fuerzas niponas podrán potenciar la vigilancia en la zona del archipiélago Senkaku (o Diaoyu, el topónimo chino), explica el nuevo Gobierno presidido por Shinzo Abe.
La compra ya está incluida en el Plan de Defensa a Medio Plazo 2011-2016. Abe y sus consejeros abogan por ampliar las facultades de las Fuerzas de Autodefensa de Japón y la creación de un Ejército moderno con todos sus atributos.
"Tenemos que mantener nuestro estatus dentro de la comunidad internacional", señala al respecto el asesor del Gobierno japonés Narushige Michishita.
Ahora las Fuerzas de Autodefensa de Japón ya están consideradas uno de los mejores Ejércitos de Asia. El país cuenta con una flota moderna y está reforzando su flota de aviones de combate. Sin embargo, pese a la situación real de su Ejército, ideológicamente Japón sigue siendo el país únicamente con 'fuerzas de autodefensa'.