El Tribunal decretó que tanto el ex jefe de Estado como su ex ministro del Interior, Habib Al Adly, deberán a ser juzgados nuevamente por su implicación en la muerte de manifestantes durante la ‘revolución egipcia’.
El pasado 2 de junio el Tribunal Penal de El Cairo condenó al ex presidente a cadena perpetua por su responsabilidad en la muerte de más de 800 manifestantes durante la revolución de 2011. No obstante, quedó absuelto de los cargos de corrupción y enriquecimiento ilícito por los que también era juzgado.
El próximo 25 de enero se conmemora el segundo aniversario del inicio de la revolución en Egipto que logró derrocar a Mubarak después de casi 30 años en el poder.
A esa revuelta, que se produjo meses después de la acontecida en Túnez, le siguieron una oleada de protestas en países del norte de África y de Medio Oriente que conformaron la denominada ‘primavera árabe’.