Un reciente escándalo con un soldado en Afganistán que se declaró culpable de orinar sobre los cadáveres de talibanes se cerró gracias a un acuerdo con los fiscales.
El soldado Robert Bales que asesinó a 16 civiles en Afganistán, crimen por el que la Fiscalía exige la pena capital, será sometido a un examen médico para que sus abogados puedan alegar que es inocente porque sufrió una lesión cerebral traumática durante su misión en Irak.
Casos parecidos a estos son ejemplos de una ineficiencia ocurrida en el interior de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, opina Julio Aliaga. Los soldados, señala, deben someterse a la justicia.
"Es muy importante que a este señor, a este soldado lo encuentren culpable, bueno, primero que le hagan un juicio que sea justo, y si lo encuentran culpable que lo castiguen de acuerdo a ley", dice el experto refiriéndose a Robert Bales.
"Eso es muy importante para que los otros soldados comprendan que están sujetos a un código de comportamiento y a un código legal, y si se hace un crimen de guerra como el que al que se le acusa este soldado, serán sometidos a la justicia, y se les impondrá el castigo que la ley impone. Esto es una cosa que pueden hacer y que es muy importante, porque deja el precedente y da el ejemplo al resto de los soldados de cuáles son las consecuencias de cometer un crimen de guerra", añade el analista.