Las maniobras comenzaron este 19 de enero y se prolongarán por 10 días. Su misión principal será la de calibrar las capacidades de despliegue, coordinación y funcionamiento colectivo de las naves de varios tipos en misiones estratégicas en alta mar, según el Ministerio ruso de Defensa.
Más precisamente, llevarán a cabo un total de 60 ejercicios militares conjuntos, entre cruceros de misiles guiados, destructores antisubmarino, fragatas de guardia y naves de desembarco y de apoyo, poniendo a prueba tanto la eficacia de artillería naval y complejos balísticos, como la preparación del personal en situaciones de emergencia.