Los impulsores de la idea afirman que el nuevo dispositivo no solo proporciona comodidad, sino que también protege el pie y proporciona soporte para las articulaciones, por ejemplo, en las competiciones deportivas. Con el tiempo esta capacidad disminuye y el chip determina el momento crítico de desgaste de los zapatos, emitiendo una señal a través de la luz del indicador o por el sonido. Así, el deportista podrá cambiar a tiempo los zapatos y así, posiblemente, evitar lesiones.
Sin embargo, la nueva idea de Apple estará al alcance no solo de los deportistas, sino de la gente común y corriente.
Además, con el tiempo es posible que Apple proporcione la sincronización de la nueva característica de los zapatos con los dispositivos móviles, como tabletas y teléfonos inteligentes.