Corea del Norte parece haber terminado los preparativos para el ensayo nuclear, ya que el equipamiento de medición ya está instalado en la entrada del centro de ensayos subterráneo en el polígono Punggye-ri, localizado en la provincia nororiental de Hamgyong del Norte, informan las autoridades.
Corea del Sur y EE.UU. están considerando posibles medidas militares y políticas a tomar en caso de que Pyongyang siga adelante con el ensayo. El presidente surcoreano, Lee Myung-bak, mantuvo una entrevista de emergencia con los oficiales diplomáticos y de seguridad. Tras la misma, el Gobierno publicó una nota en la que declara que si Corea del Norte sigue adelante "habrá consecuencias graves".
Mientras tanto la inteligencia surcoreana, que sigue monitoreando el polígono, informa de que Corea del Norte ha cubierto la entrada a uno de los tres túneles con una especie de cubierta que parece un techo, en un aparente intento por impedir que los servicios de inteligencia obtengan información, incluso los satélites espía.
Antes del lanzamiento del satélite al espacio en diciembre del año pasado hicieron lo mismo, recuerdan fuentes de inteligencia surcoreana bajo anonimato.
Este martes 29 de enero el líder norcoreano Kim Jong-un ordenó el estado de guerra.