Ethan, un menor de cinco años que padece síndrome de Asperger -un trastorno similar al autismo- se encuentra junto con su secuestrador Jimmy Lee Dykes, un veterano de Vietman, en un búnker subterráneo cerca de la casa del captor. La única vía de comunicación con el secuestrador es una tubería que sale del búnker.
Las autoridades comunicaron este sábado que Dykes
ha permitido que las autoridades entregaran al niño libros para colorear y juguetes. El primer día del secuestro los mediadores hicieron llegar al niño medicamentos que necesita tomar cada día. Ethan no está herido pero llora por sus padres y quiere volver a casa.
Jimmy Lee Dykes ha sido identificado como el autor del secuestro.
Según las autoridades, el búnker cuenta con electricidad, comida y una televisión. El mismo captor comunicó que tenía mantas y calentadores eléctricos.
Hasta el momento no se revelan los detalles de las negociaciones, pero, según escribe el diario 'Daily Mail Online', el primer día del secuestro el captor planteó una extraña exigencia: liberar al menor a cambio de un periodista al que poder contar cómo el gobierno lo había maltratado.
El ex militar secuestró el pasado martes al niño a punta de pistola en un autobús escolar después de matar de un tiro en la cabeza al conductor del vehículo que intentaba evitar el rapto.
Residentes de la zona consideran a Dykes una persona "amenazadora", que llevaba tiempo construyendo el búnker. Entre los posibles motivos, los vecinos destacan su particular desprecio por el gobierno o simplemente su deseo de llamar la atención.
El pasado miércoles estaba citado a declarar por un tribunal por una disputa con unos vecinos.