La búsqueda de Christopher Dorner , que se desarrolla sin éxito desde 2008, llegó a un centro turístico de esquí de California, tras recorrer tres estados de EE.UU. y el sur de México. Allí encontraron su camión en llamas con huellas en la nieve alejándose del vehículo calcinado.
La Policía está investigando casa a casa unas 400 viviendas en la zona de Big Bear Lake y la administración ha cerrado las escuelas locales. En la búsqueda se usan helicópteros, vehículos blindados y perros.
Dorner, un ex policía de 33 años, le declaró la guerra a algunos miembros de su departamento policial y a sus familias en un manifiesto que publicó en Internet después de su despido en 2008.
Hay testigos que aseguran haberle visto asesinar a un policía y además lo acusan de haber matado a un oficial de seguridad de la universidad y a su novia, la hija de un ex policía de Los Ángeles, señalado como uno de los objetivos de la venganza de Dorner en el manifiesto de 2008. El sospechoso culpó a su antiguo departamento no solo de despedirlo, sino también de poner fin a su carrera en la Marina y de destrozar sus relaciones personales.
El sheriff del condado de San Bernardino, John McMahon, que encabeza la búsqueda del ex policía con la ayuda de 100 agentes, afirmó que va a continuar con la misión "hasta que se descubra que ha dejado la montaña o hasta que lo encontremos".