Un técnico de Renault se puso en contacto con el joven para intentar resolver el contratiempo, pero no logró ayudarle. El conductor logro aparcar accidentadamente cuando dirigió su bólido a una zanja tras agotarse la gasolina. Sucedió ya en territorio belga, en las proximidades de la ciudad de La Panne. Lecerf, quien padece de epilepsia, fue hospitalizado tras el accidente ya que durante la carrera sufrió dos ataques.
"Mi vida pasó ante mí", cuenta el conductor que ahora ya ha sido dado de alta. Comenta que tiene planeado demandar a Renault por poner su vida en peligro. Detalla que hace tiempo los técnicos de la empresa inspeccionaron su Laguna ya que el auto -que está adaptado por el problema de Lecerf, es decir, tiene los controles del gas y los frenos incorporados en el volante- había fallado: se le atoraba el botón de control de velocidad. Los técnicos tardaron unos días en reparar la imperfección y luego devolvieron el coche a Frank, asegurándole que estaba apto para su utilización.
Renault, a su vez, comenta que es muy poco probable que el accidente se deba a un fallo técnico del coche. Atribuyen lo sucedido al pánico por parte del conductor quien, bajo un fuerte estrés, no habría podido manejar bien los botones.