Pese a todo, estas bolas de granizo de hasta cinco centímetros, no han causado víctimas ni heridos, según las autoridades.
Además de los daños materiales, este fenómeno podría afectar a la economía de la ciudad, considerada el principal lugar de veraneo de Argentina, por los destrozos que esta tormenta ha ocasionado en muchos de los balnearios y locales de la ciudad.
Una de las tormentas más fuertes registradas en los últimos 30 años"Pese a que el Servicio Meteorológico había anunciado que se esperaba tiempo inestable para el día de ayer, nada hacía prever que sería "una de las tormentas más fuertes registradas en los últimos 30 años", según señalaban fuentes de la administración local.