El accidente se produjo cuando un empleado egipcio estaba anclando el globo con una cuerda a la tierra. De repente, se rompió la manguera del soplete. Como resultado, se liberó una porción muy grande del gas que servía de combustible para el globo, las enormes llamas incendiaron el tejido del globo y el aerostato subió de repente a una altura de más de 300 metros. Poco después, se desplomó.
Según un testigo citado por la cadena británica BBC, cuando se produjo el incendio varias personas saltaron de la cesta, que estaba a "una altura de un edificio de siete pisos", intentando salvar sus vidas. Los medios egipcios, a su vez, aseguran que los sobrevivientes del accidente son exactamente las personas que saltaron del globo y destacan las graves heridas que sufrieron al chocar contra el suelo. Al principio, se trataba de tres personas, pero uno de los supervivientes ha muerto en el hospital unas horas más tarde.
Tras el accidente, las autoridades locales han prohibido los vuelos en globo aerostático en Luxor por un período indefinido. Los viajes en globo aerostático son una de las atracciones más populares en Luxor, ya que permiten a los turistas gozar de las vistas panorámicas del lugar.