No es fortuito que los ultraderechistas hayan elegido este momento para presentar la iniciativa. En medio de la crisis de la zona euro, los argumentos de los euroescépticos suenan más convincentes.
“Estamos seguros de que el Gobierno no puede resolver los problemas a los que se enfrenta Francia. Y muchos problemas proceden de la Unión Europea”, declaró Le Pen durante una reunión de su partido, “por eso proponemos que se consulte a los votantes franceses”.
Además de criticar el “dictado de Bruselas” en la economía, Le Pen criticó el régimen fronterizo dentro de la Unión Europea. Según la política, la adhesión de Bulgaria y Rumanía al espacio Schengen resultará desastroso para Francia, que ya ha endurecido su política migratoria en los últimos años.
Los otros cambios derivados de la salida de la Unión por los cuales aboga el Frente Nacional son la desvinculación del espacio Schengen, la política del proteccionismo económico y el retorno a la supremacía de la ley nacional sobre la ley comunitaria.
Marine Le Pen logró consolidar sus posiciones políticas y ser una competidora fuerte tanto para Nicolas Sarkozy como para Francois Hollande. En las últimas elecciones parlamentarias por primera vez en su historia el Frente Nacional obtuvo escaños en la Asamblea Nacional.