El jefe de la agencia nuclear de la ONU, Yukiya Amano, pidió a Irán que permita "sin demora" el acceso de expertos de la OIEA a su base militar de Parchin, donde sospecha que pudieron fabricarse armas nucleares.
Agregó que el acceso debería facilitarse sin necesidad de esperar a que las negociaciones actualmente en curso permitan llegar a un acuerdo acerca de la investigación de otras actividades que podrían estar vinculadas con el desarrollo de armas nucleares.
Las declaraciones de Amano, realizadas ante la junta directiva del OIEA, se producen tan solo un día después de que los medios de comunicación iraníes informaran de que el país islámico está fabricando 3.000 centrifugadoras de enriquecimiento de uranio de nueva generación en su planta de Natanz. Estos aparatos podrían permitir a Irán acelerar significativamente la acumulación de material que Occidente teme que podría utilizarse en la fabricación de un arma nuclear. No obstante, Irán dice que refina uranio solo para fines pacíficos.