Oficialmente el acuerdo podría anunciarse a principios de la semana próxima, según cuenta a Reuters una fuente anónima cercana al caso.
Los siete millones se dividirían entre los más de 30 estados en los que desde 2010 se desarrolla una investigación sobre las actividades llevadas a cabo por los vehículos que fotografiaban las calles para confeccionar los mapas interactivos de Google.
Los especialistas de la Comisión Federal de Comunicaciones de EE.UU. (FCC, por sus siglas en inglés) concluyeron que al menos un responsable de Street View tenía conocimiento de que los coches no solo sacaban fotos, sino que también recogían información personal a través de las conexiones inseguras de WiFi, entre los años 2008 y 2010.
En 2012, Google ya fue obligado a pagar 25.000 dólares de multa por haber obstaculizado la labor de la FCC.