El agresor tomó en un primer momento cinco rehenes: un guardia, dos profesores y dos estudiantes. Un poco más tarde el hombre, que afirmaba que tenía una bomba en sus manos, liberó a uno de los rehenes.
"Con el hombre se está ahora negociando. Pidió que le dieran comida y bebida”, dijo la Comisión de Investigación.
La policía va a entregar pizza y refrescos al hombre cuya identidad no se ha establecido, ya que usa nombres diferentes.
Finalmente todos los rehenes fueron liberados.