“Nos mantenemos unidos porque la paz debe llegar a Tierra Santa”, dijo Obama al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en su discurso al llegar al aeropuerto Ben-Gurión. A juicio del experto, el mandatario efectivamente está dispuesto para negociar la paz, pero con Irán, al tiempo que el Estado hebreo recibe un “premio de consolación”: luz verde para actuar en Siria, otro de los frentes que ellos necesitan abrir.
“Ahora Estados Unidos y Obama no van a permitir a Israel ni atacar en solitario ni permitir que los arrastren al conflicto con Irán”, pronostica Lara. “EE.UU. no quiere un conflicto con Irán ahora mismo, en este tiempo. Es que en realidad le es más beneficioso económicamente no ir, que ir a una guerra contra Irán con las sanciones, con lo apretado que se tiene a Irán y de lo que ya está sacando beneficio económico Estados Unidos”.
Lara menciona también el supuesto uso de armas químicas en las afueras de Alepo, denunciado en las vísperas del viaje de Obama. Dice que no se sabe si esos hechos coinciden por casualidad.