Israel está dispuesto a tomar medidas que aseguren la confianza entre los judíos y los palestinos, pero entre ellas no está la cancelación de las obras de construcción en el Banco Oeste del río Jordán.
En pleno curso de las negociaciones del “cuarteto” en Moscú, este 19 de marzo, la cancillería del primer ministro israelí, Benjamín Netanyaju, aceptó la capacidad de sus país para excarcelar a varios grupos de activistas palestinos, levantar los cordones y enclaves y entregar al control de la Administración Palestina nuevos territorios cisjordanos.
El gobierno de Israel se comprometió a cumplir todo lo que le soliciten los mediadores siempre que no afecte los proyectos de viviendas ya existentes o en proceso de construcción sobre territorios que los palestinos consideran suyos. Y este es el punto clave de las divergencias entre las dos partes. Las obras de los judíos en Cisjordania pueden ser frenadas, aplazadas, pero no canceladas, opinan todos los expertos a que ha acudido el canal RT. Aunque lo omitan los portavoces oficiales, la edificación de las controvertidas 1.600 viviendas no cesará bajo ningún pretexto.
David Wilder, el portavoz de la comunidad judía en Hebrón, la ciudad más grande de Cisjordania, contó al corresponsal de RT que muchos barrios e incluso asentamientos en aquella localidad y cerca de ella están creciendo por cuenta de la Fundación Moscowitz. Esa institución invierte particularmente en las obras del Banco Oeste los capitales sacados de los bingos y casinos del Estado de California.
Netanyaju y su gabinete apelarán a dificultades jurídicas, que están a disposición de las fuerzas políticas en Israel, a la opinión pública, o a cualquier cosa para no cancelar la ocupación de las tierras de la Autonomía con nuevos asentamientos, según opinan los expertos que conocen desde adentro la actividad de las fundaciones del tipo Moscowitz. La razón verdadera la constituye el flujo de caja, que los inversores derraman sobre los constructores israelíes con la única solicitud de colonizar cada vez más el Banco Oeste con nuevas viviendas.