El jefe de la diplomacia estadounidense hizo estas declaraciones en Washington durante una conferencia de prensa con su homólogo surcoreano, Yun Byung-se.
Kerry declaró a la prensa que la cantidad de amenazas por parte de Corea del Norte en las últimas semanas fue "extraordinaria" y que Pyongyang no debería tener ninguna duda de que EE.UU. va a cumplir con sus obligaciones en virtud de los tratados con los aliados en la región.
El 30 de marzo del año en curso Pyongyang anunció su salida del acuerdo de armisticio de 1953 con Corea del Sur y Estados Unidos y el regreso al "estado de guerra". Acto seguido Corea del Norte comunicó que había "reiniciado todas las operaciones en las instalaciones nucleares de Yongbyon, incluyendo las de la planta de enriquecimiento de uranio".
Esta semana la Armada de EE.UU. envió tres destructores hacia la región Asia-Pacífico ante las amenazas de Corea del Norte. El pasado lunes, el USS Fitzgerald fue desplegado cerca de la costa suroeste de la península coreana en lugar de regresar a su puerto en Japón. También el USS Decatur y el destructor USS John McCain, capaz de interceptar misiles balísticos, se dirigieron a la región.