De este modo, la infanta Cristina tendrá que acudir a declarar el próximo 27 de abril por el denominado 'caso Nóos', un escándalo de corrupción y de lavado de dinero del que está acusado su marido Iñaki Urdangarin.
Esta decisión supone un giro en el criterio del juez Castro, que anteriormente rechazó esta medida.
En el caso Nóos se investiga el desvío de 6,1 millones de euros de fondos públicos procedentes de los gobiernos regionales de Baleares y Valencia (España) a paraísos fiscales a través de la fundación Nóos, una entidad supuestamente sin fines de lucro que presidió el yerno del rey, Iñaki Urdangarín.
El dinero lavado fue también a parar a empresas ficticias de EE.UU., Reino Unido y otros países.
El ex socio del marido de la infanta Cristina, Diego Torres, declaró que tanto ella como su asesor, Carlos García Revenga, eran miembros de la junta directiva de la Fundación Nóos y que tenían un papel tan activo como el de los otros integrantes.
Según el magistrado, "surgen una serie de indicios que hacen dudar" de que [la infanta] desconociera que su esposo la utilizaba como vocal en el ámbito de influencia de Nóos". "Conviene despejar en cualquiera de los sentidos, antes de finalizar la instrucción de esta pieza, la incógnita", aclaró el juez, según informa el diario 'El País'.