Las autoridades norcoreanas no obstaculizan de ningún modo la salida a las personas que están en la actualidad en Kaesong. Desde Seúl confirman que pueden regresar a casa libremente. Pero la entrada ha sido bloqueada de nuevo para aquellos que querían atravesar la zona desmilitarizada del sur al norte.
Mientras tanto, el propio complejo industrial, que consta de 123 fábricas operadas por las compañías surcoreanas, funciona con normalidad. La agencia Yonhap admite la probabilidad de que los trabajos sean afectados próximamente si no se permite que lleguen nuevos materiales y piezas.
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur desmintió este jueves un informe de los medios de comunicación sobre la supuesta exigencia de Pyongyang de la retirada de todos los surcoreanos de las fábricas de Kaesong, estableciendo como límite para su salida el 10 de abril. Según los funcionarios, las publicaciones estuvieron basadas en una mala interpretación de un aviso del Norte.