"Hay una gran conspiración contra Siria para obligarle a cambiar su política acerca del conflicto árabe-israelí y crear un Gobierno que sirva a los intereses de EE.UU., el Reino Unido y Francia", declaró Al-Miqdad en una entrevista concedida al periódico británico ‘The Guardian’.
El diplomático mencionó el anuncio de la semana pasada del Frente al-Nusra (Jabhat al-Nusra), uno de los grupos más influyentes entre los rebeldes en Siria, en el que prometía su lealtad a Al Qaeda en Irak. Actualmente, el Reino Unido y Francia están estudiando una propuesta de EE.UU. para considerar al Frente al-Nusra
como grupo terrorista. A este respecto, Al-Miqdad insistió en que en general "el Reino Unido y Francia respaldan el apoyo a Al Qaeda, ya sea directo o indirecto".
Los dos países también declararon que están tratando de alterar los términos del embargo de armas de la UE en Siria para ayudar a los rebeldes. Por otra parte, Al-Miqdad confesó que se sentía “alentado” por la "fuerte oposición" al respecto por parte de Alemania y otros Estados miembros de la UE.
Asimismo, el viceministro de Exteriores advirtió a la vecina Jordania que está jugando un "juego peligroso" al permitir que los suministros de armas lleguen a manos de los grupos rebeldes sirios a través de su territorio.
Al-Miqdad señaló que esperaba que el país no profundizara en su participación en el conflicto. "Las mismas fuerzas que están matando a personas inocentes en Siria, se encuentran también en Jordania. Pero la conspiración se inicia en Occidente", aclaró.
Pese a todo, Al-Miqdad subrayó que Bashar al Assad no va a renunciar. "No habrá un país llamado Siria en caso de que el presidente Al Assad dimita. Si renuncia ahora, antes de que los sirios se pongan de acuerdo sobre un plan político para la nación, Siria dejará de existir en el mapa".