Las explosiones cerca de la meta final de la famosa competición de Boston, estado de Massachusetts, han dejado al menos tres muertos y más de 140 heridos, convirtiéndose en el segundo más sangriento de los recogidos en la base de datos del centro de estudios sobre el terrorismo START.
Desde marzo de 1994 se registraron al menos ocho atentados contra maratones o relacionados con ese tipo de competición en lugares tan dispares como Pakistán, Iralnda del Norte, Bahréin, Chipre y Sri Lanka.
El primer atentado registrado por START ocurrió en la capital de Chipre, Nicosia, y por suerte no causó daños personales, al igual que otros cuatro ataques. Sin embargo, en Manama (Bahréin, noviembre de 1994) y Lahore (Pakistán, enero de 2006) hubo tres y cuatro heridos, respectivamente.
El atentado más violento mencionado por START fue el 6 de abril de 2008 en la ciudad de Colombo (Sri Lanka), donde un terrorista suicida hizo detonar una bomba en el comienzo del maratón y mató así a 15 personas, entre ellas un ministro. La explosión también causó 83 heridos.
Hasta la tragedia del 15 de abril en Boston, el atentado de Sri Lanka había sido el único mortal de los perpetrados durante la celebración de estos eventos deportivos multitudinarios.