Según Escobar, a uno de ellos, Mediouni Nou, de 23 años y estudiante argelino de tecnología de la información, se le acusa de ser miembro de una célula de AQMI y un "peligroso 'ciberyihadista'" tras escribir en un foro sobre AQMI, en relación a los atentados de Boston: "Lo que sentís ahora es lo que los niños de Afganistán, Siria e Irak sienten".
El otro detenido, Hassan El Jaaouani, de 52 años y origen marroquí, es, según las autoridades españolas, un contrabandista con contactos con la yihad. Ambos fueron comparados por el ministro del Interior de España, Jorge Fernández, con los hermanos Tsarnáyev, acusados de ser los autores del atentado de Boston.
Por su parte, el padre de Mediouni, residente en España desde hace 14 años, declaró a los medios españoles que "todo es una mentira. Esto no es un país democrático", agregando que "no se es un terrorista por estar en contra de la invasión de Irak. Millones de españoles protestaron en las calles" contra aquella misma guerra.
Al final, el poder judicial, que primero había señalado que no existen pruebas concluyentes para acusar a ninguno de los detenidos de ser yihadistas de AQMI, tomó la decisión de no arriesgarse, explica Escobar, enviando a Mediouni a la cárcel, acusado de "integrar una organización terrorista" y liberando a Jaaouani, quien, no obstante, no puede salir de España.
La razón es la intención de que la nueva cultura del 'lobo solitario' desbanque a la Troika como amenaza número uno de la sociedad española.Sin embargo, esta operación que se venía investigando desde hace un año y que ha contado con la colaboración de Francia y Marruecos, ha salido a la luz justo después de los atentados de Boston, señala Escobar, quien se pegunta por qué precisamente ahora.
La razón, explica, es la intención de que la nueva "'Era del Lobo Solitario', como se ha rebautizado a la llamada 'War on Terror' ('Guerra contra el Terror') acuñada por la primera administración Bush", desbanque a la Troika como amenaza número uno de la sociedad española.
Precisamente en un momento en el que, añade Escobar, la tasa oficial de desempleo en España alcanzó el 27,1%, afectando a 6.202.700 personas y a sus familias.
Y justo cuando se ha conocido que una cuarta parte de la población de España está instalada en las puertas de la pobreza, que prácticamente la mitad de la población, entre los desempleados y pensionistas, no es productiva y que el actual Gobierno de Rajoy coquetea con una drástica reforma del sistema de pensiones impuesta por Bruselas.